Durante siglos, el agua ha supuesto un medio para el deporte y la recreación de diferentes civilizaciones. Está bien documentado que los antiguos griegos y romanos utilizaban el agua para múltiples propósitos. Algunos de éstos eran ayudar a aliviar la fatiga y el ánimo bajo, como también favorecer la higiene y alimentar la sensación de bienestar.
En la sociedad moderna, los fisioterapeutas llevan muchos años empleando el agua como ayuda para sus tratamientos de rehabilitación de lesiones y otras patologías médicas. Sin embargo, es más recientes -aproximadamente en las dos últimas décadas- cuando los profesionales de los ejercicios y la puesta en forma han adoptado el agua como un medio alternativo para desarrollar programas de mejoras de la forma física y salud. Por supuesto, se dispone de un amplio abanico de programas de ejercicios desarrollados en el agua. Estos son apropiados para mucha gente con capacidades y necesidades diferentes.
Ejercitarse en el agua crea una experiencia física totalmente distinta para el cuerpo comparado con el medio terrestre. Esto debido a que el agua tiene unas propiedades físicas únicas que afectan al organismo; las cuales no solo tienen un efecto determinado sobre los sistemas biológicos, sino también como el cuerpo se mueve y los potenciales beneficios que pueden obtenerse. No es seguro ni efectivo transferir directamente al medio acuático nuestras tradicionales sesiones de entrenamiento en tierra firme. Por supuesto, es necesario imaginación e ideas para el diseño de entrenamientos en el agua y los ejercicios seleccionados para alcanzar los beneficios óptimos.
Todos los entrenadores y entusiastas que utilizan el agua como método de entrenamiento deben tener unos conocimientos básicos solidos de las siguientes áreas para ayudar en el diseño de sesiones de entrenamiento seguras y efectivas en el medio acuático.
1.- Anatomía y fisiología básica el cuerpo humano.
2.-Propiedades del agua, sus efectos sobre el organismo y como afecta al movimiento.
3.-Ejercicios seguros y efectivos, y estructuras de las sesiones.
4.- Consideraciones de salud y seguridad para el entorno de la piscina.
5.-Capacidad, necesidades y requerimientos de los participantes.
6.-Estrategias de entrenamiento.
Lo más importante es la adaptación cuidadosa de los ejercicios para utilizar las propiedades del agua que proporcionara el primer paso hacia la estructuración de una sesión de entrenamiento seguro y efectivo en el medio acuático. Las necesidades de los participantes y las restricciones ambientales deben ser identificadas y adaptadas en la planificación inicial de la sesión. Es entonces cuando intervienen las habilidades del entrenador (Kinesiólogo) para comunicar a los participantes (pacientes) como manejar el agua para lograr los beneficios óptimos.
Guía completa de Ejercicios en el agua
Debbie Lawrence
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